El bebé tuvo que ser trasladado de urgencia en el vehículo oficial hasta el hospital de Alcañiz.
La Guardia Civil auxilió ayer (11 de mayo) a una familia en las Ventas de Valdealgorfa. El vehículo en el que viajaban se había averiado y el bebé necesitaba asistencia médica urgente.
Ayer por la tarde (11 de mayo) sobre las ocho y media, mientras componentes del Puesto de Valdealgorfa realizaban un punto de verificación en el cruce de la carretera N-420 y N-232, los agentes observaron un vehículo que estacionaba en el arcén. Al acercarse para comprobar si los ocupantes necesitaban ayuda, el conductor del coche salió del vehículo visiblemente alterado y les comunicó que el turismo se había averiado y que su hija necesitaba ayuda.
El bebé de dos años que viajaba en la parte trasera del coche con su madre sufría un ataque. La pequeña no respondía a estímulos y tenía graves dificultades para respirar. Los agentes no dudaron, y ante la gravedad de las circunstancias trasladaron de inmediato a la madre, que se encontraba en estado de ansiedad por la situación que estaban viviendo, y al bebé en el coche patrulla utilizando los elementos acústicos y luminosos (prioritarios) del vehículo para trasladarlas de urgencia hasta el hospital de Alcañiz.
Gracias a la rápida actuación de la Guardia Civil, el bebé pudo ser atendido en el servicio de urgencias del hospital en poco tiempo, evitando posibles y graves complicaciones. El bebé empezó a reaccionar positivamente poco después.