Algunos padres de alumnos del Colegio La Salle (que se autodenominan padres preocupados) nos hacen llegar la siguiente nota
EL AYUNTAMIENTO DE TERUEL CONCEDIÓ LA LICENCIA PARA LA ANTENA DE TELEFONÍA MÓVIL UBICADA EN EL COLEGIO DE LA SALLE.
Así se refleja en el informe emitido por el Justicia de Aragón sobre dicha antena de telefonía móvil.
Los padres preocupados por la existencia de dicha antena en el colegio consideran que conceder esa licencia “fue un grave error, cuando no se conocen los efectos que puede tener ese tipo de antenas sobre la salud, en este caso de los niños”.
El Ayuntamiento de Teruel, a través de la Gerencia de Urbanismo, concedió licencia de funcionamiento y licencia de obras para la instalación de la antena de telefonía móvil encima del colegio de La Salle en Teruel. Así queda reflejado en el informe emitido por el Justicia de Aragón, y enviado al grupo de padres preocupados por la existencia de dicha antena encima de las instalaciones del colegio, en una carta registrada con fecha de 17 de febrero.
A este respecto, los padres preocupados por la existencia de dicha antena consideran que conceder esa licencia “fue un grave error, ya que no se conocen los efectos que puede tener ese tipo de antenas sobre la salud de las personas, y en este caso, de los niños y niñas que acuden diariamente a ese colegio”.
En este sentido, los turolenses que manifestaron su queja ante el Justicia de Aragón se han estado informando sobre el tema. Así, quieren resaltar un informe recopilado por la Asociación Independiente para la Defensa de la Salud (ASIDES), con sede en Zaragoza, en el que se refleja que el conocido como “efecto paraguas”, que manifiestan las compañías de telefonía para justificar que las antenas no tienen efecto sobre el edificio en el que se encuentran instaladas, es totalmente falso, ya que las antenas emiten también hacia lo que tienen debajo, en este caso el propio colegio.
Igualmente, recuerdan que, tal y como han publicado los medios de comunicación, “la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa en su resolución 1815 (2011) aboga por aplicar el “principio de precaución”, y señala que ninguna antena deberá estar a menos de 300 metros de zonas sensibles como colegios, guarderías, parques infantiles o residencias de ancianos”.
El grupo de padres preocupados por dicha antena han manifestado que van a seguir dando pasos para conseguir que dicha antena se retire a un lugar más apropiado y menos sensible que el tejado de un centro educativo “al que asisten diariamente numerosos niños y niñas de nuestra ciudad”.
