33 personas han tenido que ser desalojadas esta madrugada tras un desprendimiento en la ladera del cerro Pui Pinos de Alcañiz sobre varias viviendas de la Ronda Teruel. No se han tenido que lamentar daños personales y los afectados ya han salido realojados por el Ayuntamiento alcañizano en un céntrico hotel de la localidad.
Concretamente, han quedado totalmente derruidas una casa deshabitada y dos cocheras. Otras tres viviendas sufren daños estructurales al igual que varios vehículos aparcados en la calle y en el interior de las cocheras.
El desprendimiento ha tenido lugar sobre las cinco de la madrugada cuando ya no quedaba nadie en las casas afectadas. Sobre las 2.00 la Policía Local ha llegado al lugar de los hechos al ser alertado por unos vecinos y ha procedido a desalojar a 13 personas. Una vez se ha producido el derrumbe se han desalojado a los vecinos de las casas colindantes para evitar nuevas afecciones. En total, son 33 los desalojados, a los que el Ayuntamiento ha facilitado alojamiento y manutención hasta que puedan regresar a sus domicilios. Esta mañana también se ha acercado hasta el hotel el servicio sanitario por si pudieran necesitar atención. “Ha sido una catástrofe pero afortunadamente no hay que lamentar daños personales”, ha afirmado el alcalde de Alcañiz, Juan Carlos Gracia Suso, quien ha agradecido la labor de todos los cuerpos de seguridad implicados, especialmente de la Policía Local.
Un equipo de geólogos ya se encuentra investigando el suceso. Hasta que no se conozcan las causas se mantendrán los desalojos y la ronda Teruel permanecerá cerrada al tráfico y al paso de viandantes. “No se ha procedido al desescombro porque hay riesgo de nuevos desprendimientos en el talud. Los geólogos lo están estudiando. Primero hay que asegurar la zona para que no exista nuevo riesgo”, ha afirmado el primer edil, que esta mañana se ha reunido con los vecinos y después con los técnicos.